El Septiembre del 2015
Un año de luto
Invitamos a Dios a entrar a nuestro dolor, solo así podemos fundar la vida.
Los tres nos fuimos a nuestro segundo retiro. Desde el 2014, hemos decidido tener un retiro de familia en Septiembre.
Acoja nuestro dolor el silencio.
Allí leimos el libro “Haz cambiado mi lamento en danza” de Henri Nouwen
En el libro leimos: “ Enfrentamos y aprendemos a mirar de frente nuestras pérdidas y a no evadirlas. Al enfrentar los dolores de la vida con algo que no es la negación podemos encontrar algo inesperado.
Quiero escapar del dolor a toda costa, pero cuando aprendemos a pasar por el dolor el lugar de evitarlo entonces lo recibimos de manera diferente.
Buscamos el aislamiento (el retiro de familia en Septiembre), no como una interrupción en nuestras vidas, sino como esa invitación que extendemos a Dios para que entre a lo más hondo de nuestro dolor y allí siga fundando la vida”
Mi papá, Ana y yo hemos decidido tomar un tiempo de silencio, apartarnos de todo ruido, detener la agenda cotidiana, para enfrentar y encarar refugiados en el Señor esta fecha.
El corazón necesita descansar y llorar nuestra pérdida. Esta mañana en el desayuno mi papá oro:
“ En ti Señor, comprendemos la vida, comprendemos la ausencia de Sary
Nuestro ser, está dispuesto delante de ti con sed, con necesidad de ser acompañados, de ser consolados.
Hay temor, hay miedo para como enfrentar este tiempo pero tú Señor, sabrás cómo acercarte. Por eso hoy, nos disponemos a que te acerques, entres y trastornes lo que ha dentro de nosotros”. Amén
Al terminar el 23 de septiembre y enfrentarnos al primer 24 de septiembre que viviriamos mi papá nuevamente nos dijo a las dos:
“Mami, está en su estado perfecto así entenderemos la temporalidad de la vida”.
A partir de Septiembre del 2014, hemos tenido sin interrupción y con abundancia de consuelo cinco retiros.
